Los hoteles de lujo se adaptan a los millennials, los nuevos clientes del lujo nacidos entre 1980 y 2000, ofreciendo en su estancias experiencias inolvidables y para eso hacen uso de la tecnología, el poder de las redes sociales y de la prescripción de influencers.
La cadena de lujo Shangri-La, fue la primera en introducir la experiencia de realidad virtual a través del Samsung Gear VR, que le permitía a los huéspedes visitar los distintos hoteles que tienen alrededor del mundo.
Por su parte Marriott, involucrado de lleno en la satisfacción virtual de sus clientes, ofrece desde hace apenas un año el servicio “VRoom” mediante el cual los huéspedes pueden pedir sus gafas Samsung para vivir tres histories de 360º en 3D: en los Andes en Chile, en una heladería de Ruanda o caminar por las transitadas calles de Pekín. Además ha creado un departamento, M Live, destinado exclusivamente a analizar aquello que se escribe sobre ellos o sucede en sus hoteles de lujo y garantizar un feedback inmediato.
Ritz- Carlton es una marca de lujo conocida por su excelencia en el servicio que ha renovado su página web, con más de 50 millones de visitas únicas el año pasado, para darle protagonismo a sus huéspedes. La estrategia de la cadena de hoteles de lujo consiste en que los usuarios etiqueten sus fotos con el hastag #RCMemories o #RitzCarlton, y éstas se pueden ver en la página del hotel y en las distintas redes sociales del grupo. Un total de 30.000 páginas de imágenes e información, vídeos y características de diseño interactivo, que quieren llegar a sus usuarios mostrándoles la experiencia que pueden vivir en sus hoteles.
El interés en satisfacer a los millennials es evidente, además quieren saber cómo estos utilizan las nuevas tecnologías que evolucionan a pasos agigantados y si realmente el Storytelling virtual es la próxima tendencia para enganchar a este nuevo público.