Stella McCartney y su campaña más sostenible

El lujo se ha vuelto más sincero, también lo han hecho sus esfuerzos de marketing, y como resultado ha habido un aumento en las campañas que abarcan la individualidad para hablar a los consumidores y concienciar sobre la ética y moda sostenible.

La diseñadora británica vuelve a defender la moda ética en su campaña otoño-invierno 2017, para la que ha contado con el artista Urs Fischer y la fotógrafa Harley Weir. Las modelos Birgit Kos, Iana Godnia y Huan Zhou pasean las propuestas de la firma por un vertedero del este de Escocia al son de Tkay Maidza.

Cada vez son más las marcas que se  preocupan por las futuras generaciones, y esta ha sido la forma en que lo ha expresado la diseñadora. Concienciar a generaciones como la Millenial quien tiene tanto poder de prescripción en el entorno digital y están tan comprometidos con comportamientos sociales es muy importante, sobre todo con temas que cada vez preocupan más como es el medioambiente.

Stella McCartney utiliza esta campaña para lanzar un crítico mensaje contra el consumismo desmedido que existe en el mundo de la moda. La diseñadora siempre ha resaltado por querer hacer las cosas diferentes y preocuparse por el futuro. Una de sus metas es lograr que otros diseñadores se sumen a su filosofía y se replanteen el objetivo y huella que quieren dejar en este planeta.

Entre la basura y olores, las modelos sonríen como símbolo de amor y esperanza para con el planeta. Pretenden motivar a las personas y a los diseñadores para que tomen la decisión correcta de parar, o al menos disminuir, la gran contaminación existente de este mercado.

Esta propuesta es el claro ejemplo de que el éxito en la industria de la moda va más allá de la fabricación en masa. La moda con conciencia sí tiene mercado y es posible crear prendas nuevas y modernas con métodos sostenibles.

 

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